sábado, 25 de abril de 2009

Prólogo

PRÓLOGO

Este libro lo he compuesto con historias que se han producido en Corrubedo y con ayuda de mi amigo Cristóbal, interrogando a personas y aprovechando todo aquello que se escucha he intentado narrarlo todo tan exacto como me fue posible.
Estas historias destacan, cada una en su estilo, lo poco común y las casos especiales que ocurren en Corrubedo y alrededores! Normalmente se diría, ¿ cómo? ¿ aquí? ¿ en el fin del mundo? No ocurren cosas poca comunes, pero que ocurre todo lo contrario voy a demostrarlo a continuación.
En primer lugar quiero presentarme:
Me llamo Ralf Kolmsee, y soy de Alemania, vivo desde 1996 en una pequeña casa en Teira. Como pensionista uno tiene mucho tiempo para ocuparse de la tierra y su gente. Hace muchos años, y durante más de una década, veraneaba todos los años en Corrubedo con mi familia y teníamos aquí bastante amistad con tres familias, amistad que todavía conservo!
EL apoyo necesario para la finalización de estas historias lo recibí de mi querida esposa Pili.


viernes, 17 de abril de 2009

martes, 7 de abril de 2009

Historias de Corrubedo







EL SEÑOR DEL PERIÓDICO




Le pusimos el nombre de “el señor del periódico” no porque publicase él un periódico o porque fuese el redactor de uno de ellos, ni tampoco porque lo repartiese, no … él mismo llevaba, a velocidad de moto, las nuevas desde una punta de Corrubedo a otra y gracias a él se hacían públicas todas las informaciones de carácter personal. De esta forma cualquiera que quisiera podía estar al día de lo que pasaba. Su incansable dedicación hacía de Corrubedo un pueblo completamente bien informado que buscaba en Galicia su semejante .- más actual, más rápido y más auténtico de lo que sería posible a través de cualquier otro medio de comunicación moderno. De pronto la historia sufrió un cambio brusco y el señor del periódico tuvo que someterse a varias operaciones de cadera. Debido a su largo deambular por las salas de operaciones de toda Galicia la comunicación en Corrubedo casi dejó de existir. A pesar de que finalmente pudo volver a caminar sin dolor, dejó de moverse en moto y con ello de ejercer su servicio de información. Los abonados al periódico local volvieron a incrementarse y las noticias volvían a transmitirse por el aburrido medio de comunicación.