lunes, 6 de julio de 2009


EL HOMBRE DEL TRACTOR Y SU HERMANO
Hasta donde me puedo acordar todavía de él, el nombre correcto del hombre del tractor era José. Además de en el bar, sólo se le podía ver con el tractor; parecía estar pegado a su herramienta de trabajo. Contaban que trabajando se lesionó una vez gravemente una pierna, se dice que bajo los efectos del alcohol y gracias a una rápida intervención no tuvo que ser amputada.
Su hermano Ramón conducía en aquel tiempo (nosotros teníamos una pequeña casa de verano en el Corgo) muy temprano por la mañana con ruido estridente un carro de bueyes para transportar hierba recién cortada para sus vacas. Cuando descubrió que yo era dentista, me pidió que sanease su dentadura bastante descuidada. En una situación normal en caso de un tratamiento así se procede de la siguiente manera, una vez explicada la situación de la boca y antes de sanearla, se aplica la anestesia local, que fue rechazada absolutamente por él. Nos pusimos de acuerdo en que tomase unos pequeños coñacs antes y que entonces podríamos poner la inyección local. Como acordamos, así lo hicimos. Se dejó tratar sin emitir un solo tono de queja. En poco tiempo (desde Pascua hasta agosto) le preparé en mi laboratorio en Alemania dos prótesis dentales y así pudo apañarse con ellas como si ya las hubiese usado más veces. Desde entonces bebía su copa en primera fila del bar pues todos le hacían sitio al resplandeciente labrador.
Casi se me olvidaba comentar que como pago, digamos de mis honorarios, me entregó unos cientos de las mejores patatas de Corrubedo. Pero como esto ocurrió dos días antes de finalizar mis vacaciones tuve que repartírselas a mi familia de aquí. A propósito de las patatas, se trata de uno de los tipos de patatas más sabrosas del mundo!! Qué alguien se atreva a decir lo contrario !!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario